Vista Previa de la Descarga


•Gratis•
Estaba charlando con mi hermano mayor que es médico. En la conversación me dijo algo que para mí fue revolucionario. “No podemos sanar a nadie,” mi hermano Roberto me dijo, “Podemos ayudar en el proceso pero sólo Dios puede sanar.”
Nunca había pensado en eso. Dios es el único que sana. Los médicos pueden recetar medicinas y hacer cirugías pero no tienen la habilidad de sanar. Toda sanidad viene del Señor. Enfrentamos una plaga enorme que ha afectado miles de personas en más de 145 países que lleva por nombre “Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida” o sea el SIDA.[…]
206 descargas gratuitas de nuestros usuarios.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.